martes, 24 de agosto de 2010

¿Alguien me puede explicar?



A horas de haber sido asaltado (entre otras cosas) un autobús de una reconocida empresa de viajes en una autopista me dispongo a recoger mis maletas para regresar a mi casa, si, iba a viajar con la misma empresa.


Como si las personas en el terminal hubiesen sido las víctimas, varios de los pasajeros con los que voy en el autobús están asustados, su rostro sería el mismo a si les avisaran que su mascota acaba de ser atropellada por el camión del aseo.

¿La primera mitad del viaje?, aburrida. La película "Una niñera en apuros" hizo que me colocara los audífonos con solo ver el título. Luego de la parada de descanso y de comerme la respectiva arepa en Bejuma nos colocan una película de humor (La gente seguía con cara de pocos amigos en la parada así que supongo que el chofer quiso tranquilizar avivar los ánimos)

Ya sin auriculares y riéndome del humor absurdo de "Este cuerpo no es mío" noto que el autobús no se esta moviendo, no solo eso sino que llevamos rato estacionados.

¿Dónde estamos?, le pregunto a mi hermana que estaba en la ventanilla. Ella se asoma y me hace señas para que vea.

Al rededor de una decena de personas paradas al costado del autobús, entre ellos el chofer. Hombres, mujeres, niños y ancianos con bolsos de mano, almohadas y cobijas pidiendo que por favor los llevemos. Si, otro autobús de la misma linea se había accidentado en la autopista y los pasajeros literalmente suplicaban que los sacaran de ahí.

Era como si el carro de Drácula viniera detrás de nosotros y los que se quedaran, los guisaban.

Entre los comentarios a mi alrededor se escuchaban:

- "¡Por Dios! ¡Recojan a esa gente!"
- "¿Cómo se le ocurre al chofer bajarse?"
- "¿Abrió la puerta del autobús?, ¡Esta loco!"
- "!No los suban!, ya estamos full, si sobrecargamos el autobús nos podemos voltear..."
- "¿Cuánto falta?" (Ese último fui yo)

Luego de una larga discusión de casi media hora, todos los accidentados abordaron la unidad. Los que consiguieron asientos disponibles se sentaron, los que no se fueron parados en el pasillo tal cual camionetica con autobusero muerto de hambre del centro.

No tengo que especificar el soberano rollo que se formó en el terminal al llegar a nuestro destino (Sobretodo cuando el piloto se detuvo otra vez en el peaje para bajar a los pasajeros de más, quienes se negaron a descender del autobús)

Esta experiencia me trajo de regreso a muchas preguntas que no me hacia desde que mi madre fue arrollada por un motorizado en la capital y éste se detuvo para decirle "¡Coño señora!, ¡fíjese donde va nojoda!"

- ¿Qué pensaba la gente que quería dejarlos ahí? (Si bien nosotros estábamos en riesgo ellos también)
- ¿Qué pensaba el chofer cuando se bajó? (También podía ser una trampa y estaría echando el cuento de como empecé una nueva vida)
- ¿Porqué ahora hay que tener miedo de quedarse accidentado?
- ¿Porqué es tan difícil hacerle mantenimiento a un autobús?
- ¿Que satisfacción tienen los antisociales por hacer lo que hacen? (No me vengan que lo hacen por necesidad porque la mayoría de esos tipos tienen más plata que yo)

En realidad todas estas preguntas se conglomeran en una que siempre me hago...

¿Qué mierda tiene la gente en la cabeza?... Si alguien me explica se lo agradecería...

1 comentario:

  1. Jajajaja.., que entretenido es leer las desgracias de los demás.. =D

    Y si yo también he pasado por cosas viajando..

    Así como una vez que íbamos vía Lara le dije a la Sra que tenia en los asientos de al lado que cerrara la ventana porque entraba mucho aire y la ventana se fue completa.. Cabe destacar que no nos paramos a recogerla y cuando le comente al chófer lo que había pasado lo que hizo fue acelerar..

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